Imagen: Un espejo de la nobleza de Japón. El emperador Meiji, su esposa y el príncipe Haru.

125 Poemas (Gyosei) del Emperador Meiji Tenno - 明 治 天 皇

El Emperador Meiji (Meiji Tenno) escribió más de 100.000 poemas. De esos 100.000 poemas Usui Sensei seleccionó tan sólo 125 poemas, y los incluyó en su libro de lecciones que entregaba a sus estudiantes, denominado Usui Reiki Ryoho Hikkei (靈猟法必携).

Estos poemas seleccionados (Gyosei) tienen todos ellos 31 caracteres ideográficos kanji, y son mucho más que un alimento para el alma y el corazón de las personas. Encierran en sus kanjis una "semilla energética" de una profunda sabiduría para la elevación de nuestra espiritualidad y nuestro desarrollo como canales de Reiki. Constituyen, junto con los 5 principios (Usui Reiki Gokai - 五戒), la columna vertebral de lo que es Reiki como "filosofía de vida" y son el trazado de pequeñas piedrecitas dejado por Usui Sensei a los practicantes de Reiki, para que Reiki sea un camino para llegar al Satori (悟り); el despertar o la iluminación en el Budismo Zen.

Por su importancia, no sólo estaban transcritos en la guía "Usui Reiki Ryoho Hikkei", sino que en las reuniones semanales de la Usui Reiki Ryoho Gakkai, los practicantes de Reiki recitaban algunos de los poemas seleccionados del Emperador Meiji incluido en el manual "Usui Reiki Ryoho Hikkei", a fin de que los asistentes a la reunión elevasen su conciencia, los fijasen en su memoria y en su corazón espiritual (kokoro - 心). A ello, además, contribuye la especial disposición de su métrica, de 31 caracteres kanji, con la estructura de versos.

Los poemas seleccionados son un elemento necesario para que todos los practicantes de Reiki mantengan un nivel alto de conciencia en su vida diaria por su valor ético. Todos y cada uno de ellos encierran una enseñanza que cada alumno debe de integrar y poner en su corazón espiritual (kokoro-心).

A continuación destacamos algunos de los poemas elegidos por Usui Sensei, por su belleza.


Escuela Española de Reiki Profesional
Fotografía del emperador Meiji tomada en 1873
Meiji (1868-1912)
Fotografía de Uchida Kuichi
The Cleveland Museum of Art(Kinoshita)


1- Aunque, muchos han partido ya de nuestro lado, la luna de otoño sigue siendo la misma de siempre.
2- Quisiera que mi corazón sea inmenso como el cielo, transparente, verde claro y sosegado.
3- Si pienso en los campesinos que se afanan en el arrozal hirviente por el sol, cómo quejarme entonces del calor.
4- Tras las lluvias de otoño, en un instante el viento ha dispersado las hojas de arce que cubrían el suelo.
5- Contempla la piedra horadada por las gotas de lluvia y aunque el trabajo sea arduo, no cedas en tu empeño.
6- Quien medita sobre sus propios errores no mira con rencor al cielo ni reprocha nada a otros.
7- Cuando a veces reflexionamos las cosas en exceso nos vemos abocados a conclusiones erróneas.
8- Es el corazón de la amistad verdadera la mutua advertencia de nuestros errores.
9- Frente a este mundo tormentoso, mantengamos firme el corazón, como el pino enraizado en la roca.
10- Las olas del océano, que se agitan turbulentas y después se calman, se parecen en verdad a este mundo nuestro.
11- Aunque la familia prospere y podamos cuidar nuestro atavío, no olvidaremos nunca cultivar los valores internos.
12- El árbol como el hogar, resiste el viento si en armonía crecen sus ramas.
13- Suceda lo que suceda en esta vida efímera, plenos de riqueza han de permanecer nuestros corazones.
14- Cuidemos nuestro cuerpo con constancia, en vez de buscar la inmortalidad en las medicinas.
15- Cuando caiga la noche y nos envuelva el zumbido de los mosquitos, pienso ¿donde acamparán los soldados?
16- Inspirándose en aquellos que alcanzaron grandes logros, crecen en el estudio los jóvenes japoneses.
17- La ventura de las flores que brotan junto al estanque tras caer en él, siguen flotando en el agua.
18- Cediendo a la luna la superficie del estanque, las luciérnagas se esconden bajo las hojas.
19- Un poco de polvo basta para atenuar el brillo de una joya sin rasguño.
20- En lugar de estudiar con precipitación aquellos que siguen el camino del aprendizaje, deben aplicarse.
21- Que estemos inmersos en este mundo ajetreado, no impida que sirvamos a nuestros padres.
22- Hasta las hierbas más amargas escogidas con cuidado,son buenas medicinas.
23- Pese a culminar sus estudios y obtener un diploma, los jóvenes deben proseguir su aprendizaje.
24- Aunque crezcan de la misma semillas, que distintas entre sí son las clavelinas.
25- El eco de la cascada resonará en el mundo sólo si una roca rompe la caída del agua.
26- El agua que se adapta a cualquier forma de recipiente, también puede ser capaz de atravesar la roca.
27- Mientras las malas hierbas se multiplican, mueren las raíces de las plantas que sembramos.
28- Un anciano ayudado por su nieto, aguarda firme para recibirme.
29- Observando los bosques fosilizados, pienso en cuanta gente abandonó el mundo sin dejar rastro alguno.
30- Conduce al calor del bracero, al anciano que me visita cuando aún cae la nieve.
31- Poco importa la belleza de nuestra escritura, lo esencial es que pueda leerse.
32- Seguimos siendo niños ante el corazón de nuestros padres a pesar de haber alcanzado la plenitud de la vida.
33- Quedaron atrás los solitarios ancianos, con qué valentía van los jóvenes soldados a defender el país.
34- Aún los pájaros que vuelan libres en el cielo, nunca olvidan buscar un nido donde dormir.
35- Un niño aprendiendo a escribir, nos hace recordar que en este mundo nos queda todo por descubrir.
36- Las clavelinas que brotan en un jardín cultivado, se abren con fuerza aún bajo el peso del rocío.
37- La honestidad del corazón humano, hace llorar a los diablos.
38- Después de cumplir con nuestros deberes, es cuando podemos ponernos detrás de las flores.
39- Cuando no reflexionamos sobre nosotros mismos, apenas percibimos lo más superficial de nosotros.
40- También los picos más altos que se elevan hacia el cielo, ofrecen senderos hasta la cumbre.
41- Solo tras ordenar nuestros pensamientos, podremos hablar con convicción ante otros.
42- No debemos olvidar la discreción, aún cuando el mundo gire según nuestros deseos.
43- Es mejor no desear más en esta efímera vida, de lo que nuestras capacidades permitan.
44- De las débiles ramas de los pinos jóvenes, sacudamos la nieve acumulada.
45- Los nombres de aquellos que murieron para que se perpetuara el país, quedarán indelebles en mi corazón.
46- Para quien nos visita sin importarle el agobiante calor del sol ardiente, ponerle sin demora un ventilador.
47- El corazón humano se hace más bello, cuando todo en él renuncia a la apariencia.
48- Si rehuimos a las dificultades de la vida, terminamos por no emprender nada.
49- No se dejen tentar por deseos efímeros, aquellos que son el sostén de la familia.
50- Hasta las palabras más sencillas, pueden contener la esencia de nuestros principios.
51- Llegado el momento que el barco viaje veloz, no siempre hay que confiar en el timón.
52- Por mucho que se las elogien, apenas hay en este mundo joyas sin defectos.
53- Cuando viajo, pienso en las labores que abandonaron quienes vienen a saludarme.
54- Ni siquiera frente a enemigos del país a quienes debamos vencer, el sentimiento de clemencia puede caer en el olvido.
55- Quisiéramos hallar la fórmula de la vida eterna, para aquellos ancianos que viven por el bien del país.
56- Entre las repetidas historias del pasado, se encuentran las advertencias del anciano.
57- Es al anochecer cuando lamentamos haber dejado pasar el día sin provecho.
58- Los padres que piensan en su hijo en el campo de batalla, no pueden conciliar el sueño ni en las noches de primavera.
59- Las advertencias de la gente de buen corazón, son curativas incluso para el cuerpo sano.
60- Pese a vivir una vida muy ocupada, siempre hay momentos de sosiego para perseguir el camino de los sueños.
61- El mundo ajetreado es como la hierba de verano, una vez separada, se eleva con más fuerza.
62- Cuando pensamos haberlo superado todo, sometemos nuestro corazón al peor de los enemigos.
63- Aún siendo estrechos los senderos entre los campos de cultivo de montaña, podrán avanzar los campesinos si se ceden el paso unos a otros.
64- Los jóvenes marchan al campo de batalla y un anciano queda solo cuidando la tierra.
65- Tan sereno como el sol de la mañana que se eleva, quisiera tener yo mi corazón.
66- La lluvia de primavera humedece los tatamis, me pregunto cómo se encontrarán en los cuarteles.
67- Despertado en el medio de la tormenta en una noche de frío intenso, pienso en las chozas de la gente humilde.
68- No lamentes que carece de brillo aquella joya que olvidaste pulir lo suficiente.
69- Cada aguja del reloj cuenta el tiempo a su manera, adelanta o atrasa siguiendo su propio ritmo.
70- Que no nos lleve nuestro deseo de avanzar más rápidamente por caminos que nos despierten desconfianza.
71- Saber avanzar en el momento oportuno, nos libera de adentrarnos por sendas arriesgadas.
72- Qué triste, olvidar sin darnos cuenta el corazón puro de los niños.
73- Para crecer recto el bambú joven del jardín, más puede torcerse en cualquier momento.
74- Para nuestros ojos, los cerezos silvestres de las montañas, parecen nubes florecidas entre los pinos.
75- Qué sofocante es el calor en estas casas de la ciudad con ventanas estrechas tan cerca una de otras que el aire no penetra en ellas.
76- La dignidad del corazón humano, se manifiesta en el servicio diligente a nuestros padres.
77- Atravesando el paso de los años, llegamos a comprender el corazón de nuestros padres.
78- Podrá ser pequeño el jardín de la enseñanza de nuestros padres, pero mañana nos ayudará a habitar un mundo mucho más grande.
79- Entrega las flores del cerezo al borde del río con su perfume de primavera y no lamentes su vida pasajera.
80- El polvo se acumula sin que le demos importancia, cómo nos pesará después el trabajo para quitarlo.
81- Con el paso de los años me arrepiento del niño que fuí, que encontrando monótonas las lecciones las descuidó.
82- Brille el sol o bajo nubes, el bienestar del pueblo ocupa mis pensamientos.
83- Aunque sea más larga la andadura, escoger el camino recto nos evita peligros.
84- Los años atraviesan como flechas el espacio, hagamos cada cosa a su justo tiempo.
85- Pese a los obstáculos, rememos despacio y con paciencia el río oscuro de la noche.
86- Qué duro el camino del aprendizaje, más no descansemos si tan sólo anduvimos a la mitad.
87- No merece la pena vivir largos años, si nuestras vidas se extinguen sin aportar nada singular al mundo.
88- No siempre colmar los deseos es lo más adecuado para nuestras vidas.
89- Incluso en días de apacible oleaje, los marineros vigilan el timón.
90- Aunque vayamos rezagados tras otros que avanzan por el mismo sender, nunca nos desviemos del camino correcto.
91- Las clavelinas cargadas de rocío se sacuden el peso que las comba en dirección no deseada.
92- Aunque busquemos cuidadosamente no hallaremos joya alguna sin defecto.
93- Un hijo adquiere independencia más seguirá siendo niño en el corazón de sus padres.
94- Tras independizarnos, mantengamos vivo el agradecimiento a nuestros padres.
95- Quizá la montaña guarde en su interior flores de oro, pero si no la abrimos su luz permanecerá oculta.
96- Acaso nuestro camino pueda ser ancho como en la vida, no nos confiemos, podemos tropezar en cualquier momento.
97- No lamentemos que en todo este mundo, pocas personas puedan situarse por encima de otros.
98- Salgo de este mundo inmenso y a menudo siento que mi corazón se cierra.
99- Nuestra avanzada edad no debe ser la excusa para abandonar aquello que todavía podemos ocuparnos.
100- Sólo cuando el jefe de familia es firme, la casa se hará de buena madera y gozará de prosperidad.
101- Nos dirán que es un país bien gobernado, cuando numerosos políticos sumen sus esfuerzos.
102- Tras acabar su carrera, no debe el joven doctor, olvidar el agradecimiento a sus maestros.
103- No escribamos nunca nada que luego no podamos asumir en la prensa que todos leen.
104- Es triste que el agua pura y transparente del manantial termine de caer al turbio río.
105- Por más pesada que sea la carga, los bueyes lentos y seguros no tropezaran jamás.
106- Un corazón honesto no se avergüenza ante dioses que no puede ver.
107- A menudo pensamos que las cosas no progresan sin detenernos a reflexionar sobre nuestra propia falta de esfuerzos.
108- La ayuda mutua en la amistad verdadera, es nuestra mayor fuerza para sobrevivir en este mundo.
109- Cuidemos al pino antiguo del jardín para preservar aún más su larga vida.
110- Los campesinos que guardan su campo nunca reposan tranquilos, desde la siembra hasta el tiempo de la cosecha.
111- Tras ser azotado por la nieve y las tormentas, el pino se eleva aún más erguido.
112- Elegir lo positivo y descartar lo negativo iguala nuestro país a otros.
113- Quienes somos célebres en este mundo, hemos de cultivar ante todo nuestra discreción.
114- De vez en cuando los caracoles salen de sus casas para observar el mundo.
115- Se vencen todos los peligros de este mundo cuando no nos desviamos del camino correcto.
116- El aprendizaje para salir al mundo, es el tesoro que cada uno lleva dentro.
117- No agiten sus corazones ante el torbellino de la sociedad, aquellos que aún cursan sus estudios.
118- Quedaremos rezagados ante los demás si no avanzamos en el momento oportuno.
119- Aquellos que ejercen poder sobre otros, deben dar el ejemplo con la rectitud de sus acciones.
120- Cuando nuestro comportamiento no es el correcto, qué difícil es ocuparnos de la educación de los demás.
121- Si todos nos encontramos en el mismo océano... ¿Por qué crear tempestades y tormentas?
122- La fuerza del río comba y doblega las clavelinas y sin embargo, entre las ondas, ellas florecen.
123- Aunque gocemos de entretenimientos que nos plazca, no descuidemos nuestras tareas cotidianas.
124- Prestemos al corazón oídos cada tanto, o sin saberlo, nos perderemos.
125- Anhelo pulir mi propio corazón, cuando lo veo reflejado en los corazones puros de los demás.


"Tu hogar es donde tus pensamientos encuentran la paz."
Zen


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